Preservar acervos documentales es conservar el conocimiento y la memoria histórica

Durante esta semana, la Escuela Nacional de Conservación, Restauración y Museografía (ENCRyM) «Manuel del Castillo Negrete» es, por primera vez, sede del Coloquio Internacional sobre Líneas de Trabajo en Materia de Conservación y Restauración en Bibliotecas y Archivos, tema que representa una tarea monumental, la cual, más que preservar objetos físicos, permite conservar el conocimiento y la memoria histórica.

Lo anterior quedó de manifiesto durante la inauguración del foro académico, concebido por la UNAM, en marzo de 2011, con el objetivo de fomentar el intercambio de conocimientos y experiencias entre especialistas en materia de conservación y preservación, tejer lazos de cooperación entre repositorios con acervos documentales, así como fortalecer y retroalimentar los trabajos del Seminario Permanente de Preservación Documental.

Luego de cuatro emisiones, celebradas de manera bianual, la quinta edición del coloquio se efectúa fuera del campus universitario y es alojado por la ENCRyM, escuela del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) con reconocimiento a nivel mundial.

Durante la ceremonia inaugural, Silvia Salgado Ruelas, coordinadora de la Biblioteca Nacional de México, de la UNAM, destacó que el coloquio es un trabajo de organización colectiva, en el cual colaboran más de 20 instituciones; Se trata, dijo, de un evento importante porque cita a los especialistas en conservación y a las instituciones que resguardan los acervos, reunidos con el interés de poder preservar estas colecciones para el futuro.

María del Carmen Castro, coordinadora nacional de Conservación del Patrimonio Cultural (CNCPC) del INAH, destacó la importancia de realizar la conservación del patrimonio documental de manera conjunta y entre varias instituciones. «Es una lección que dejaron los sismos de 2017, valorar la importancia del trabajo en equipo». Actualmente, agregó, la CNCPC desarrolla varios programas nacionales, entre ellos, el de Conservación de Documentos, el cual «se nutrirá con la información que se genere en el coloquio, para perfeccionarlo».

Hugo Casanova Cardiel, director del Instituto de Investigaciones sobre la Universidad y la Educación (IISUE): explicó que la institución que representa tiene más de 50 años, y entre sus tareas está la custodia del Archivo Histórico de la UNAM. Coincidió en la relevancia del esfuerzo interinstitucional, «porque la conservación de archivos no es una tarea que pueda llevar a cabo una sola institución, se necesita del esfuerzo de muchas».

Asimismo, refirió que la preservación de los materiales documentales no se restringe al objeto físico, tiene que ver con la preservación del conocimiento y, en este sentido, «lo que hace la ENCRyM es invaluable para quienes hacemos investigación, su tarea tiene que ver con las manifestaciones culturales en todos los sentidos, y eso ha honrado históricamente a esta escuela».

En su intervención, Araceli Rodríguez Moreno, secretaría Técnica del Instituto de Investigaciones Estéticas (IIE) de la UNAM, destacó que, desde su fundación, el IIE ha tenido un gran interés y compromiso por la defensa y conservación del patrimonio cultural del país; amén que resguarda un importante fondo documental y bibliográfico disponible para consulta pública.

Comentó que los acervos fotográficos del Instituto han servido como una fuente importante para las labores de diagnóstico y restauración de monumentos afectados por los sismos de 2017.

En entrevista, el director de la ENCRyM, Gerardo Ramos Olvera, comentó que esta institución educativa «se siente honrada de recibir la estafeta para la realización del coloquio; el cambio de sede busca abrir nuevas perspectivas y hacer visible la participación de otras instituciones que se han ido involucrando en este tema, con el mismo grado de responsabilidad y profesionalismo que la UNAM».

Cabe recordar que dicha actividad académica nació en la máxima casa de estudios, como parte de los trabajos en la Biblioteca Nacional de México, en los cuales se invitó a colaborar a otras instituciones relacionadas con el cuidado de documentos, «son ya casi 10 años de historia de este coloquio, y desde sus inicios el INAH ha colaborado de manera continua», explicó Ramos Olvera.

El restaurador y museólogo comentó que México cuenta con un acervo documental inmenso, y aunque en materia de conservación y restauración se ha logrado un trabajo importante, aún falta mucho, «si pensamos en lo que resguarda el Archivo General de la Nación, los repositorios de la UNAM o del INAH, tenemos retos importantes, por eso necesitamos seguir formando restauradores que se dediquen a los archivos.

La ENCRyM cuenta con tres espacios formativos de alta especialidad, exclusivos para el tema de archivos: en licenciatura imparte el Seminario Taller de Restauración de Documentos; el optativo de Conservación y Restauración de Fotografía, y la Maestría en Conservación de Acervos Documentales. «En este campo toca trabajar códices, cedulas reales, libros del siglo XVI, fotografías, cuya temporalidad abarca 500 años al día de hoy, y ya comenzamos con los formatos digitales», abundó Ramos.

Asimismo, destacó que muchos de estos documentos han dado información valiosa de nuestras raíces e identidad, «de cómo se ha ido conformando una nación, no solamente estamos restaurando y conservando objetos, sino la memoria histórica».

El titular de la ENCRyM señaló que el deterioro de los documentos se da, principalmente, porque las condiciones en las que se guardan no son las apropiadas: control de clima, de humedad, de temperatura, de luz; los mismos contenedores, «por eso es importante que los espacios donde se resguardan colecciones cumplan con los mínimos requerimientos.

«El trabajo de la conservación y restauración, requiere no solo de gente manualmente experta, sino formada en la investigación documental y científica, en estudios de material (papel, tinta) y apta para a definir las condiciones en las cuales se guarda una colección; debe tener el panorama completo: teórico, histórico, científico», indicó.

En el 5º Coloquio se impartirán tres conferencias magistrales, tres conversatorios, nueve ponencias, cinco carteles y tres talleres. Para las ponencias y cursos hay tres invitadas internacionales: Anne Maheux, conservadora por más de 30 años de importantes archivos y bibliotecas de Canadá, quien abordará la conservación en la era de Google; Sonja Schwoll, restauradora del Instituto de Conservación del Reino Unido; y Vilena Figueira Rodríguez, quien coordina el equipo de conservación de la colección del Archivo de la Fotografía Urbana en Venezuela.

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