El protagonista del Día de la Candelaria

Fotografía: Nayelli García. Tamales

Con los festejos del Día de la Candelaria, culmina el ciclo de Festividades de la Navidad. Ese día se levanta el nacimiento, se llevan candelas a bendecir, se hace la presentación del niño Dios en el Templo. Se busca un padrino para que vista al niño, que será para el año siguiente.

En esta fecha se realiza el «levantamiento del niño» en ciudades y pueblos, el cual consiste en llevar imágenes del Niño Dios a bendecir a los templos, y en levantar y guardar las figurillas del nacimiento hasta el siguiente año, además de que aquellas personas que les tocó el «niño» al partir la rosca de Reyes el 6 de enero, están obligadas a invitar a todos los concurrentes tamales y atole el 2 de febrero, también este día en algunos lugares como en Xochimilco, se realiza el cambio de Mayordomía, hay música de banda acompañando la danza de los Chinelos, estudiantinas y cohetes.

Para algunos pueblos indígenas, este día se bendicen las mazorcas que van a servir de semillas para la próxima temporada de siembra. Para varios pueblos en esta fiesta, todo se purifica, desde la conmemoración del fin de la cuarentena de María y la presentación de Jesús en el templo, hasta las semillas del maíz, frijol, trigo y otros cereales que serán sembrados ese año; todo esto, pasando por la bendición de las velas que serán usadas para que el alma de algún difunto tenga una luz que lo acompañe en su camino al más allá.

Turok señala que esta fiesta coincide con las celebraciones a Tláloc y su hermana Chalchiuhtlicue (dioses del agua), donde se realizaban sacrificios, incluso, nos habla de un posible vínculo con la tradición de los compadres de rosca de reyes (las personas que encontraron un «niño» al partir la rosca de Reyes el 6 de enero los cuales este día ofrecen tamales y atole), con la fiesta Huauhquiltamalqualiztli, que se realizaba a la mitad del decimoctavo y último mes del año Izcalli, donde se comían tamales por todos los pueblos, en todas las casas, y toda la gente se convidaba unos a otros.

En nuestros días todavía se puede ver este sincretismo en Coatetelco, Morelos, pues en este lugar se acostumbra poner en los altares ofrendas de comida como pipián y tamales de «ceniza», llamados tlaconextamalli, los cuales una vez bendecidos se reparten entre los asistentes y una parte de esta ofrenda es llevada a un cerro cercano, donde la deposita en una cueva para pedir las lluvias. También se acostumbra llevar a la Virgen de la Candelaria en procesión con música, cohetes y danzas.

El consumo del tamalli o tamal, vocablo náhuatl, que significa envuelto cuidadoso aporta varios siglos de culturas indígenas diversas, plurales con su propio significado cultural que le ha permito su permanencia en la gastronomía nacional. Fray Bernardino de Sahagún reporta en su Historia General de las cosas de Nueva España que los tamales se ingerían durante diez festividades del anuario ritual del pueblo mexica.

Cuando los españoles llegaron a Mesoamérica encontraron que los pueblos originarios celebraban la fiesta de los tlaloques en honor del dios de la lluvia al inicio del ciclo agrícola. Esta ceremonia coincidía con el Día de la Candelaria, 2 de febrero, del calendario católico que conmemora la Purificación de la Virgen María y la presentación del Niño Jesús en el Templo.

El consumo del tamal, durante una celebración. Llegó a nuestros días aún cuando la religión y los dioses cambiaron y algunas veces se sincretizaron en algunos pueblos indígenas.

Actualmente los nombres de los tamales son asignados según su contenido: de rajas con queso, de calabaza, de haba, de papa, de frijol, de mole, de chile, de dulce. Por su color: verdes y rojos, donde ya está implícita la salsa en la que están bañados. Hay tamales de frutas: piña, capulín, ciruela, chabacano, tejocote, pitahaya en el norte del país, de pescaditos, charales o carpa, y en época de lluvias, los hongos son el ingrediente principal que acunado en las hojas de maíz y sazonado sobriamente con ajo, cebolla y epazote, constituyen una delicia.

Comisión Nacional para el Desarrollo de los Pueblos Indígenas

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