La artista inauguró la instalación Hasta el último aliento en la explanada del Palacio de Bellas Artes
Podrá visitarse hasta el domingo 5 de noviembre
En el marco de la celebración del Día de Muertos, y como un homenaje a las víctimas del más reciente terremoto en nuestro país, así como a las personas que participaron en las labores de rescate, la artista Betsabeé Romero inauguró el pasado 28 de octubre la instalación Hasta el último aliento en la explanada del Palacio de Bellas Artes.
Se trata de una semiesfera de ocho metros de diámetro y dos de alto que representa a la Tierra, con sus meridianos y paralelos, cubierta de flores de papel. A manera de una ofrenda tradicional, alrededor se colocaron 19 vitroleros, 19 cazuelas con flores, 19 serigrafías y 19 calaveras.
“Estamos en duelo, y creo que es momento de acompañarnos y reforzar toda esta energía que en medio de la tragedia nos ha conmovido tanto”, comentó la creadora mexicana.
La instalación también cuenta con una cabina para crear una memoria oral de todos los que tienen algo que contar respecto a los recientes sismos que afectaron nuestro territorio.
“Los momentos más difíciles de nuestra vida personal los tenemos que guardar para aprender de ellos, que no nos vuelvan a suceder y ser mejores, por lo que considero que a nivel social nos pasa igual, tenemos que ser muy cuidadosos con nuestra historia, lo mejor es contarla nosotros mismos y no que nos la cuenten otros”, afirmó.
Romero además elaboró cajas en miniatura, de doce por ocho centímetros, como las que se llenaron con víveres y circularon por todos los sitios de damnificados en la capital y en otras entidades que tuvieron problemas, para que, al igual que las originales, la gente las rotule con sus buenos deseos.
“México es un pueblo admirable y muy generoso, está celebración del Día de Muertos me permite contactar con el público del cual aprendo muchísimo, por su generosidad, compasión y solidaridad. Estoy agradecida y este también es un homenaje a ellos”.
Y agregó: “El Día de Muertos es la prueba de que la cultura es un vehículo que puede traspasar épocas, colonizaciones y tragedias. Es una celebración que viene desde lo prehispánico, que nos habla de la fortaleza de las culturas y me doy cuenta que es cada vez más impactante, no solo en nuestro país, sino en todo el mundo”.
Hasta el último aliento permanecerá en la explanada del Palacio de Bellas Artes hasta el domingo 5 de noviembre.